El intendente de Paraná, Sergio Varisco y el gobernador de la provincia, Gustavo Bordet, recorrieron este jueves los barrios afectados por la crecida del río Paraná, en la capital entrerriana.
Ambos destacaron la posibilidad de trabajar en conjunto Nación, Provincia y Municipio. “Estamos atentos porque el río creció unos 15 centímetros más y tememos que supere las defensas”, dijo el jefe comunal. Por su parte el mandatario entrerriano sostuvo que “se está trabajando desde todos los sectores para llegar rápidamente con la logística que hace falta”.
Acompañaron la recorrida, el vicegobernador Adan Bahl y otros funcionarios municipales y provinciales.
Varisco manifestó su satisfacción por el interés mostrado por el gobernador por las zonas afectadas. “Queríamos hablar con los vecinos para saber que más hay que hacer para proteger las defensas”, dijo y aseguró que están atentos a cualquier cambio “porque el río creció unos 15 centímetros en estos días y tememos que se superen las defensas y que las familias queden inundadas”.
Por su parte el gobernador Bordet, aseguró que los comportamientos de los ríos Paraná y Uruguay son totalmente diferentes, lo que provoca inconvenientes distintos. Las ciudades de la costa del Uruguay se ven más afectadas, pero en las localidades de la costa del Paraná el agua, a pesar de que llega más lento, también ha provocado daños e inundaciones en viviendas como en La Paz y el cierre de todas las playas. “Estamos en emergencia en toda la provincia”, sostuvo.
Además informó que hay sectores productivos afectados, campos anegados y rutas cortadas. “Estamos viendo toda esta situación y estamos trabajando con todos los sectores articulando trabajo entre Nación, Provincia y Municipio para llegar rápidamente con la logística que hace falta”, señalo.
Por último felicitó a todos los vecinos que trabajan para defender sus hogares y el de los demás. “Nosotros también estamos aquí para decirles que estamos juntos para trabajar con ellos”.
Desagotan la laguna de Bajada Grande
Personal de la Municipalidad de Paraná desagotaron mediante bombas y máquinas viales la laguna de Bajada Grande para descomprimir la situación en ese poluloso barrio, una de las zonas más afectadas por la crecida del río Paraná, en la capital provincial.
Ángeles Giménez de la comisión vecinal, indicó que en la zona todavía hay familias que resisten, “porque no quieren abandonar sus viviendas pero hay algunas que se autoevacuaron”. Destacó que son pocas las personas que viven en la costa porque la mayoría son casas de fin de semana.
Fuente: LT14