«Ya detectamos 7.500 personas fallecidas que aparecen con la compra de medicamentos con descuento parcial o total del Pami», dijo Carlos Regazzoni, titular de Pami.
«Esto pasó porque no hubo controles internos, no se cruzaba el padrón de afiliados con el registro de fallecidos, había médicos que fraguaban las recetas o les fraguaban las recetas y en muchos casos había connivencia de las farmacias y hasta de la propia industria», agregó.
Esos remedios eran luego revendidos en el «mercado negro» a clínicas y farmacias, en un circuito que se realimentaba y crecía mes a mes.
Fuente: Diario 26