Los fruticultores de Río Negro y Neuquén reclamaron al ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, la necesidad de contar con «precios sostén» para poder hacer viable la producción de frutas, junto con la creación de un instituto sectorial que permita regular la producción de manzanas y peras.
Fue durante una reunión mantenida en la noche del miércoles, que del algún modo se anticipó al anuncio formulado por el jefe de Gabinete, Marcos Peña, quien anunció la concreción del encuentro para la jornada de hoy, al brindar el informe de gestión ante la Cámara de Diputados.
El encuentro de Buryaile y los fruticultores se concretó tras la protesta llevada adelante por los productores el martes en Plaza de Mayo, donde regalaron manzanas y peras a los transeúntes, en el marco de una protesta destinada a concientizar a los consumidores y a las autoridades sobre la falta de rentabilidad del sector.
Uno de los participante de la reunión, el director de la región Patagonia Norte de la Federación Agraria Argentina (FAA), Erik Muñóz, dijo que le transmitieron a Buryaile la necesidad de crear un Instituto de la Pera y la Manzana que regule el mercado de dichas frutas para el establecimiento de un precio sostén y establezca “límites” a las empresas exportadoras del producto.
“Muchos productores desaparecieron, y muchos lo seguirán haciendo, al menos que haya una política pública que establezca un precio sostén y que se cree un Instituto de la Pera y la Manzana poniéndole algunos limites a las exportadores”, afirmó el directivo, responsable de los federados de las provincias de Neuquén, Chubut y Río Negro, regiones productoras por excelencia de éstos frutos.
Muñóz explicó a Télam que, según el sector que él representa, las empresas agrupadas en la Cámara Argentina de Fruticultores Integrados (CAFI) “tienen un manejo distorsivo y extorsivo hacia los productores”.
“El Alto Valle del Río Negro garantiza 30 toneladas por hectárea de producción. A eso te lo compran, te lo prefinancian y te establecen un precio, ponele 0,20 centavos de dólar. Vos le entregas la producción y al final de año en vez de pagarte lo establecido, te pagan 0,12 centavos, porque te dicen que hay menos compradores, por lo que los precios bajaron y, a continuación, te dicen que por tener una fruta que no califica para exportar no se pudo vender, lo cual nadie controla y es incomprobable. Eso es lo que debe controlar el instituto”, comentó el federado.
Entre los pedidos que se le realizaron a Buryaile, a la que caracterizaron “con buena voluntad política, con soltura y claridad” se encontraban el pedido de compensaciones y la necesidad de establecer un precio sostén.
“El costo de producción hoy se encuentra entre los 4,5 y 5 pesos, mientras que los productores reciben, en el mejor de los casos, entre 2,5 y 3 pesos. Lo que se pide que se garantice el costo y una rentabilidad minina del 30%”, manifestó.
“Nosotros queremos que se regule la actividad, pero necesitamos una compensación y que se cumpla con la Ley de Emergencia, porque la provincia no baja los fondos, por lo que no puede renovar las platas, podarlas ni aplicar un plan sanitario y otra compensación para poder tener previsibilidad y realizar los trabajos concernientes para la cosecha del año que viene”, continuó.
Muñóz agregó que “invertir en una chacra es un lujo que los productores no se pueden dar”, sostuvo que la apertura de importaciones de manzanas “complica” al sector, y que desde diciembre se produjo la desaparición de 600 productores de 2700 registrados y que en 20 años la propiedad de las tierras de cultivo pasó de un 70% en manos de cultivadores y un 30% en manos de las empresas a la inversa.
Desde el Ministerio de Agroindustria dijeron que recibieron «a la federación que correspondía, por una cuestión de institucionalidad” y que “se está trabajando para la implementación de medidas de mediano y largo plazo para el sector” ya que “no se puede resolver en 8 meses lo que hace años está mal”.
Entre las medidas que destacaron para el sector se encontraban la “unificación del tipo de cambio, la eliminación de los Registros de Operaciones al Exportación (ROE), que benefició a las economías regionales, la eliminación de las retenciones, el reintegro en los puertos patagónicos y la sanción de la Ley Pyme”.
Además, desde el ministerio indicaron que “estados ayudando a financiar a los productores, dimos préstamos por un monto de 600 millones de pesos a tasas subsidiadas, los fondos rotatorios y la apertura de nuevos mercados”.
En la reunión con Buryaile también participaron dirigentes federados y de las Cámaras de Productores frutícolas de Río Negro: Pablo Castel (Presidente Filial FAA Villa Regina y por la Cámara de esta localidad), Sebastián Hernández (presidente de la Cámara de Allen), Carlos Borochi (Cámara de Allen), Juan Oller (presidente Cámara de Avellaneda) y Carlos Zanardi (Cámara de Fernández Oro).
Fuente: Télam