Productores lácteos de localidades del sur santafesino denunciaron ayer que tuvieron que tirar más de 7.000 litros a raíz de los bloqueos a plantas de la región que protagonizan un sector de productores nucleados en la Asociación de Productores de Leche (APLA), los transportistas de Atlara, e integrantes del sindicato
Los bloqueos impiden el ingreso y egreso de camiones con la materia prima a plantas de Saputo, en Sunchales y en las instalaciones de la localidad de Bella Italia. El derrame se debe a que el producto se estanca en los establecimientos y se echa a perder.
La Mesa de Productores de Leche de Santa Fe (Meprolsafe) calculó que el derrame podría alcanzar los más de tres millones de litros de leche en las próximas horas, de extenderse el conflicto.
La medida de fuerza impulsada por APLA y Atilra arrancó este domingo luego de que las industrias rebajaron el precio que pagan a los tamberos por el litro de leche cruda. El objetivo es dar marcha atrás a esa decisión, en un sector que ya atravesaba una merma en el valor internacional del producto y el encarecimiento de los costos internos.
Asimismo, se pronunciaron desde la Meprolsafe, la Federación Agraria Argentina, y la Sociedad Rural de Rafael y Sunchales. A través de un comunicado, las asociaciones empresarias repudiaron «la acción de bloqueo a la salida de productos elaborados y el consiguiente accionar de la empresa afectada que, unilateralmente, suspendió el retiro de leche de sus entregadores y la negativa de otras empresas procesadoras a recibir leche ya retirada de los establecimientos remitentes».
En oposición a esto, uno de los referentes de la protesta, Daniel Oggero calificó de «locura»la decisión de rebajar los precios que pagan las industrias por la materia prima. Según relató al diario La Capital, a principio de año el litro de leche retirado en tranquera estaba a 3,15 pesos. Tras una reducción a 3,10 pesos, las industrias pretenden llevar el valor de 30 centavos a julio. «Para nosotros esta propuesta es inviable», afirmó el dirigente de APLA.
«Llegó la hora que el productor tome conciencia y se cambie la historia de la lechería en el país. No puede ser que sólo se quieran salvar los empresarios y al resto que Dios los ayude. Los 9.000 productores que quedamos tenemos que plantar bandera y luchar», expresó.
Fuente: Infobae