El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, se reunió esta semana en Moscú con el presidente ruso, Vladimir Putin, para garantizar a Rusia, un aliado del mandatario sirio, Bashar Al Assad, que Washington no busca un «cambio de régimen» en Siria.
Ayer, el jefe de la diplomacia estadounidense se reunió con el canciller de Arabia Saudita, Adel al-Jubeir, para asegurar al reino, uno de los principales detractores de Al Assad, que Washington no será blando con el mandatario sirio.
El delicado equilibrio de las gestiones de Kerry busca mantener tanto a Moscú como a Riad dentro de las 17 naciones del Grupo de Apoyo Internacional para Siria (ISSG, por sus siglas en inglés), que está encargado de echar a andar conversaciones de paz.
Estados Unidos y el enviado especial de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, quieren que el gobierno de Al Assad y grupos de la oposición armada y política siria envíen delegados a Nueva York para mantener conversaciones de paz para el 1 de enero.
Anoche, en una entrevista, Al Assad advirtió que esfuerzos mal dirigidos para promover un cambio de régimen harán que el conflicto se perpetúe, informó la cadena de noticias BBC.
El mandatario agregó que sólo sus aliados de Rusia e Irán -y no Occidente- están listos para resolver la guerra de ya casi cinco años, que comenzó en marzo de 2011 y ya dejó más de 250.000 muertos y más de 11 millones de refugiados o desplazados.
En caso de alcanzarse un acuerdo de paz en Siria, entonces el Ejército sirio, Rusia y la coalición encabezada por Estados Unidos que bombardea al Estado Islámico (EI) podrán concentrar sus acciones en el combate contra este grupo islamista radical.
En virtud de un acuerdo alcanzado el mes pasado por diplomáticos de una veintena de países en Viena, los negociadores del gobierno y la oposición política y armada tendrán seis mese para formar un gobierno de transición y 18 meses para organizar y
convocar elecciones nacionales.
La semana pasada, la oposición siria aceptó participar de conversaciones de paz con representantes del gobierno y ayer eligió al ex primer ministro sirio Riad Hiyab como jefe del equipo negociador.
Sin embargo, varias cuestiones aún no han sido resueltas.
Por ahora no se sabe si Al Assad, Rusia e Irán aceptarán negociar con grupos rebeldes armados apoyados por Occidente a los que consideran «terroristas».
Por su parte, la oposición ha insistido en que Al Assad debe renunciar al inicio del proceso de transición, algo que Rusia descarta como precondición y considera que debe ser decidido por los sirios.
En las conversaciones de hoy en Nueva York, se espera que el canciller ruso, Serguei Lavrov, consulte a Arabia Saudita sobre sus esfuerzos para supervisar la conformación del equipo negociador de la oposición siria.
El Departamento de Estado norteamericano dijo ayer que Jordania informará de cómo ha progresado en su tarea de confeccionar una lista de los «grupos terroristas» que serán excluidos de las conversaciones.
Esta semana, Kerry dijo en Moscú que había plena coincidencia entre Estados Unidos y Rusia de que el EI y la filial siria de Al Qaeda, el Frente Al Nusra, son organizaciones «terroristas» que no tendrán ningún lugar en el proceso.
Todavía resta determinar, también, quién estará encargado de supervisar el eventual alto el fuego y quién liderará el combate contra el EI y el Frente Al Nusra.
Para discutir estas y otras cuestiones, el ISSG, con Kerry y Lavrov a la cabeza, se reunirá en la mañana de hoy en un hotel de Nueva York para tratar de acercar posiciones.
Los diplomáticos se dirigirán luego a la cercana sede de Naciones Unidas para buscar el aval al proceso del Consejo de Seguridad de la ONU, algo que se da por descontado en caso de acuerdo previo.
Luego de serios desacuerdos y una guerra de sanciones entre Estados Unidos y Rusia por el conflicto en Ucrania, Kerry esta semana agradeció en Moscú el rol «constructivo» de Rusia en Siria.
También bajó el tono sobre las exigencias previas de Washington de renuncia de Al Assad como condición esencial para que el proceso tenga éxito.
«Hoy enfatizamos que Estados Unidos y sus aliados no buscan un cambio de régimen en Siria», dijo Kerry el martes pasado en el Kremlin luego de reunirse con Putin y Lavrov.
«Lo que hemos dicho es que no creemos que Al Assad tenga la capacidad de conducir el futuro de Siria», agregó.
Fuente: Télam