Esta circunstancia se dio durante el entrenamiento de este domingo por la tarde, mientras 21 jugadores se movían a las órdenes del preparador físico y el volante Lucas Biglia seguía con su habitual trabajo diferenciado al costado de la segunda cancha de entrenamiento del Spartans de San José.
Messi salió por tercer dìa consecutivo a trabajar también diferenciado, pero a diferencia de los dos anteriores esta vez se movió con la pelota, y en la primera que tocó le apuntó al travesaño para comprobar si en el remate no le dolia la maltrecha parrilla intercostal izquierda.
El «clinnnn» que devolvió la pelota al golpear en el travesaño fue la primera prueba de que su pegada prodigiosa no sufre alteraciones visibles, aunque es cierto que un entrenamiento no es un partido, y el que se viene ante los chilenos será muy duro de afrontar.
Pero minutos más tarde, cuando la prensa ya había sido retirada del lugar, Martino se acercó a paso vivo hacia donde se
encontraba Messi y, a solas, le preguntó como se sentía, a lo que ‘Lío’ le respondió positivamente, con un «bien» ininteligible pero claramente perceptible que Télam pudo observar desde una posición cercana, entre las lonas que cubren los alrededores del campo de entrenamiento.
Después la charla continuó, pero si como dijo Martino unas horas antes, primero se va a esperar la opinión del médico y luego se escuchará lo que quiere el jugador, remarcando que finalmente se respetará su voluntad por encima de la del facultativo, ya que «Messi conoce su cuerpo mejor que nadie y es muy inteligente a la hora de tomar este tipo de decisiones», entonces estará presente este lunes ante los chilenos.
Y esto puede suceder, pese a que trabajó muy poco durante la semana, no hizo fútbol con sus compañeros y tiene un ‘jet lag’ de ocho horas desde que viajó de Barcelona a la costa oeste de los Estados Unidos, simplemente porque es Messi, el mejor del mundo.
Fuente: Télam