El Gobierno justificó hoy el accionar de la Gendarmería sobre los trabajadores de la línea 60 de colectivos en la autopista Panamericana. Lo hizo a través de Aníbal Fernández, quien señaló que los manifestantes «arrojaron cantidades industriales de piedras» sobre las fuerzas de seguridad.
«Se ven muchísimas agresiones de los choferes a la Gendarmería, no puede suceder que los trabajadores hagan lo que se les antoje», argumentó el ministro, en referencia a los incidentes que se produjeron ayer por la mañana.
Aunque aclaró que no estuvo en el lugar de los hechos, en Panamericana y ruta 197, partido de Tigre, el jefe de Gabinete indicó -en su habitual contacto con la prensa en la Casa de Gobierno- que «los choferes no tienen que ser actores directos en el conflicto», ya que «hay un sindicato» que es la Unión Tranviarios Automotor (UTA) que conduce Roberto Fernández.
El funcionario kirchnerista aseguró que «hay 900 choferes que quieren trabajar», y apuntó que el gremio «conoce que hay gente que quiere seguir con el conflicto sin razón, porque detrás de todo esto hay algo que motiva el conflicto».
Al ser consultado sobre cuál puede ser la razón que impulsa el reclamo, Fernández diagnosticó:»Los trabajadores no están de acuerdo con el nuevo grupo que compró la empresa, porque no les permite formar parte del management (el manejo de la compañía)… Para eso deberán ir a una discusión judicial y no hay dudas de que va a ganar el grupo que puso la plata para ser dueño de la empresa».
Fuente: Télam