Por el sismo, siguen los riesgos de derrumbes en la localidad salteña El Galpón

El sismo de 5,9 grados en la escala de Richter que el sábado por la mañana azotó la localidad El Galpón de Salta y dejó sin vida a una mujer de 94 años, parece estar cesando. El temor de los habitantes continúa por las 25 réplicas que dejaron unos 30 heridos y obligaron a las autoridades locales y provinciales a evacuar a más de 20 personas por el corte de los suministros de agua y electricidad y los continuos derrumbes de las propiedades.

La entrada a esa localidad sigue bloqueada para toda persona que no sea residente, es decir, que solo propietarios y vecinos pueden moverse por la zona afectada. El subsecretario de Defensa Civil de Salta, Ernesto Flores, comunicó hoy que pese al miedo de la gente, la situación «está más estable» y, por el momento, no hay indicios de nuevos temblores aunque permanece el estado de alerta.

«Estuvo muy duro en las primeras horas para la gente. Fue muy violento el sismo y la población se encontraba mal anímicamente, panorama que se fue recomponiendo con el tiempo y la ayuda que fuimos recibiendo en las primeras dos o tres horas cuando empezó a llegar personal de Bomberos y Defensa Civil. Hubo unos 30 heridos que llegaron al hospital local, pero están todos fuera de peligro«, precisó el funcionario tras aclarar que afortunadamente volvieron los servicios de agua y luz.

Por su parte, Héctor Romero, intendente de El Galpón, señaló que hubo demasiadas réplicas. «Hubo un trabajo en conjunto con el personal de bomberos, Defensa Civil, personal de trabajo del gobierno de la provincia, con un gabinete psicológico para atender a los ciudadanos». A su vez, agregó que el Ejército está realizando las tareas de demolición de las casas en peligro de derrumbe. En los accesos al municipio, ubicado en el departamento de Metán, hay policías e inspectores de tránsito que solamente permiten el ingreso a los vecinos del lugar y a sus familiares directos.

«Con los equipos de trabajo que hemos organizado se han relevado 357 viviendas, de las cuales 170 presentan daños, otras 18 deben ser demolidas en el pueblo y otras dos en la zona rural, mientras que 34 van a ser apuntaladas para que se proceda a su reparación», confirmó Flores en diálogo con El Tribuno de Salta.

El funcionario dijo que «la zona más afectada es la del centro de El Galpón, donde se encuentran las edificaciones más antiguas, de las cuales muchas cayeron y otras quedaron inhabitables». Y añadió: «Estamos tratando de impedir que entre gente a hacer lo que se denominaturismo de desastre, por lo tanto solamente pueden entrar los vecinos y sus familiares directos, para eso se requiere documentos de las personas. Todavía hay riesgos de derrumbes y tenemos que hacer prevención».

En tanto, ayer se hicieron tareas de remoción de escombros de las calles y algunas propiedades con maquinarias y personal especializado. «El Ejército de Salta ya hizo un primer relevamiento con sus ingenieros y va a comenzar hoy con las tareas de apuntalamiento de los lugares con mayor riesgo y los trabajos previos para realizar los derrumbes de los lugares que quedaron inhabitables y no pueden ser salvados. Esto va a llevar bastante tiempo porque algunos lugares requieren complejas tareas», indicó el subsecretario de Defensa Civil al mismo medio.

El sismo se sintió en Tucumán, Jujuy, Santiago del Estero, y algunas zonas de Catamarca y Chaco, y tuvo su epicentro en cercanías de la localidad de Metán, con una magnitud de 5,9 grados en la escala de Richter. Las primeras réplicas fueron de casi tres grados cada una. Incluso hubo una muy fuerte a las 8.38, pero que no fue sentida por la conmoción que había causado el primer temblor.

El movimiento tectónico se ubicó a una profundidad de 10 kilómetros a 51 kilómetros de Metán y 163 al norte de San Miguel de Tucumán y se prolongó por aproximadamente quince segundos. El geólogo Enrique Chalabe explicó al portal Qué Pasa Salta que las réplicas son «movimientos de ajuste», usuales luego de este tipo de temblores. Además, comentó que en general son de menor magnitud, aunque la regla tiene excepciones, como el histórico sismo de San Juan, en 1997, cuando se produjo «un sismo en cadena» cuyas réplicas superaron al movimiento inicial.

Fuente: Infobae